Miguel Cané es la escuela albergue ubicada en la localidad de Bauchaceta. Allí, en un humilde edificio ubicado a 2640 metros de altura, asisten casi una docena de niños y niñas que llegan con la esperanza de aprender y educarse.
En el mes del maestro, la Fundación Señor Gonzalez conoció la historia del maestro rural Javier Ortiz, quien en un programa radial comentó la rutina diaria en la escuela y el deseo puntual de tener un parlante para que los niños y niñas puedan reproducir la música de Aurora mientras se iza la bandera. Sin dudarlo, el presidente de la Fundación Señor González se contactó con el docente e inmediatamente donó el equipo de música que la escuela necesitaba.
“Agradezco profundamente de corazón la donación. No contábamos con este elemento y ahora tendremos la posibilidad de entonar Aurora bien temprano en el mañana acompañado de la música y, sin dudas, sonará más fuerte. La Fundación está ayudando así, a revivir y fortalecer en los pequeños el sentir patrio.”, manifestó Javier, el docente que desempeña la noble tarea de enseñar en ese inhóspito lugar y que recibió el parlante de la mano de Eduardo Savastano, CEO del Grupo González y de Roberto Damico, Gerente General de Señor González y vicepresidente de la Fundación.
Kiara, Nicole, José y Daniela son los nombres de algunos de los alumnos que asisten a la escuela albergue y que se transforman en familia durante los diez días que viven allí con el docente; luego, vuelve cada uno a su casa por cinco días y así, comienza el ciclo nuevamente.
La escuela se creó en la década de los ’70 y cuenta con energía eléctrica que es provista mediante paneles solares, es por esto que el equipo donado por la Fundación Señor González es portátil e inalámbrico para que se pueda trasladar sin necesidad de estar conectado a cables, tiene batería recargable y luces led; además de entrada para micrófono, USB, bluetooth, ecualizador, ranura para tarjeta micro SD y micrófono, entre otras características.
Los objetivos rectores de la Fundación Señor González es brindar apoyo a la educación y se encuentran en sintonía con el responsable y abnegado trabajo que, en nuestro país, realiza Toyota Argentina Saciedad Anónima y con esta donación, cristaliza aún más su misión.